En tus ojos azules
me he mirado,
soñando un imposible, vida mía,
a punto estaba de nacer el día,
y escuchaba su voz en mi costado.
Despierto andaba el
corazón, callado,
navegando en tu cielo, fantasía,
bailaba la ilusión, y
amanecía,
en el viejo rincón de mi pasado.
Brillaba en mi
retina transparente,
la luz de un gran amor, sobrecogido,
que llegaba hasta ti constantemente,
y en la tuya el azul,
lo vi perdido,
detrás de una gran nube, simplemente,
porque ya para ti hubo amanecido.
Cerraste la
ventana a la ilusión,
bajaste la persiana de la espera,
no quisiste subir por la escalera,
que tendiera hasta ti
mi corazón.
Y seguía
esperando, a la sazón,
que tu puerta, cariño, se me abriera,
y tus ojos, de cielo y primavera,
volvieran a mirarme con pasión.
Me quedé con tus
ojos y hermosura,
transido de dolor , fruncí mi ceño,
y tuve que aceptar en
mi cordura,
que mi amor hacia ti fue un dulce empeño,
una hermosa ilusión, una locura,
un triste navegar, tan solo un sueño.
O.Z.M.